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En un mundo tan acelerado como el que vivimos, conseguir que nuestro cerebro descanse y desconecte se ha convertido en todo un reto. Este órgano se mantiene ocupado durante muchas horas al día (a veces demasiadas), por lo que es vital aprender a desconectar. Sin embargo, no siempre es fácil conseguir ese nivel de desconexión, pero existen ciertos hábitos que nos pueden ayudar.
No te engañes, todas tenemos 30 minutos al día en los que no hacemos nada. Aprovéchalos para realizar alguna actividad que te permita conectar contigo misma y te evada de todo. Meditar, hacer yoga, leer, socializar, hacer deporte, … Regalarte pequeños momentos de placer al día es una apuesta segura para darle a tu cerebro la dosis de dopamina necesaria para seguir con el día a pleno rendimiento y cuidar de tu bienestar.
Parece tópico, pero no somos conscientes de la importancia que el descanso juega en la salud de nuestro cerebro. Dormir y tener sueños profundos ayuda a su oxigenación, lo cual se traduce en una mente más sana, ágil y concentrada.
Y, hablando de tópicos, no podemos olvidar el clásico “somos lo que comemos”. Con el ritmo frenético al que estamos expuestas, cada vez resulta más complicado huir de la tentación de los alimentos procesados y del fast food. Estos alimentos contienen propiedades muy alejadas de las que nuestro cuerpo y mente necesitan para un funcionamiento óptimo, repercutiendo de forma negativa en nuestro rendimiento y capacidad de concentración.
Muchas veces es complicado incluir en nuestra dieta todos los nutrientes y vitaminas que nuestro cuerpo y mente necesita. Por ello, cada vez más, los expertos recomiendan echar mano a los suplementos nutricosméticos. Mayor capacidad de concentración, descansos más profundos, boost de energía y vitalidad,… son algunos de los beneficios más destacados de la revolución nutricosmética de Optimum Health.
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¿Sabías que el cerebro también se entrena?
Lectura de 3 minutos
24 de abril de 2024
Te traemos algunos tips de expertos para mejorar tu rendimiento y capacidad de concentración.
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En un mundo tan acelerado como el que vivimos, conseguir que nuestro cerebro descanse y desconecte se ha convertido en todo un reto. Este órgano se mantiene ocupado durante muchas horas al día (a veces demasiadas), por lo que es vital aprender a desconectar. Sin embargo, no siempre es fácil conseguir ese nivel de desconexión, pero existen ciertos hábitos que nos pueden ayudar.
1. Conectar con nosotras mismas
No te engañes, todas tenemos 30 minutos al día en los que no hacemos nada. Aprovéchalos para realizar alguna actividad que te permita conectar contigo misma y te evada de todo. Meditar, hacer yoga, leer, socializar, hacer deporte, … Regalarte pequeños momentos de placer al día es una apuesta segura para darle a tu cerebro la dosis de dopamina necesaria para seguir con el día a pleno rendimiento y cuidar de tu bienestar.
2. Descansar
Parece tópico, pero no somos conscientes de la importancia que el descanso juega en la salud de nuestro cerebro. Dormir y tener sueños profundos ayuda a su oxigenación, lo cual se traduce en una mente más sana, ágil y concentrada.
3. Llevar una dieta saludable y equilibrada
Y, hablando de tópicos, no podemos olvidar el clásico “somos lo que comemos”. Con el ritmo frenético al que estamos expuestas, cada vez resulta más complicado huir de la tentación de los alimentos procesados y del fast food. Estos alimentos contienen propiedades muy alejadas de las que nuestro cuerpo y mente necesitan para un funcionamiento óptimo, repercutiendo de forma negativa en nuestro rendimiento y capacidad de concentración.
4. Tomar suplementos alimenticios
Muchas veces es complicado incluir en nuestra dieta todos los nutrientes y vitaminas que nuestro cuerpo y mente necesita. Por ello, cada vez más, los expertos recomiendan echar mano a los suplementos nutricosméticos. Mayor capacidad de concentración, descansos más profundos, boost de energía y vitalidad,… son algunos de los beneficios más destacados de la revolución nutricosmética de Optimum Health.
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